En lo que respecta a los servicios de vuelta, llegarán hasta Eibar los autobuses que salgan de la Universidad en los siguientes horarios: 13.10, 15.10, 18.10 y 20.30. Al igual que a la ida, tendrá parada en la Uni Eibar-Ermua, así como en la estación de autobuses de Ego-Gain.
El Ayuntamiento quiere mostrar su satisfacción porque la demanda que durante años ha estado trasladando a la Diputación Foral de Bizkaia ha sido finalmente atendida y resuelta favorablemente.
En este sentido, el Consistorio quiere agradecer al nuevo Gobierno del Ejecutivo Foral guipuzcoano que haya entendido que la ampliación de la línea Eibar-UPV en Leioa «es importante y está justificada, así como la rapidez con la que, por fin, se ha dado una solución a la situación», decía el alcalde, Miguel de los Toyos. De esta manera, a partir del 1 de octubre, los universitarios y otros usuarios potenciales de esta línea verán resuelta la demanda que llevan realizando desde hace tiempo, evitando, así, que tuvieran que desplazarse a Ermua para coger desde allí el servicio operado por Bizkaibus, tal y como se han visto obligados a hacer hasta el momento, con el coste y el trastorno que ello les ha estado suponiendo.
Incomprensible demora
Esta era una de las peticiones que estaban cursando las familias y los mismos estudiantes que tenían que desplazarse a Ermua, con la consiguiente pérdida de tiempo.
Si desde las instituciones se hablaba de que el transporte público tenía que ser más ágil, rápido y eficaz, facilitando un buen servicio a todas las capas de la población, los estudiantes no entendían que no hubiese un servicio directo de autobús desde Eibar a la UPV. Ocurría que los universitarios eibarreses que estudiaban en Leioa (UPV) tenían que montarse en el tranvía a Ermua y ahí coger el autobús para después parar en Durango para recoger a otros estudiantes. El trayecto se cubría en una hora para llegar a Leioa una hora después. Por ello, ante la falta de este servicio a la Universidad, los estudiantes no tenían más remedio que trasladarse en coches particulares o bien las familias de Eibar se veían obligadas a alquilar pisos o residencias, con gastos muy importantes.
Por ello, desde el Ayuntamiento se tomó este asunto como prioritario, pero siempre se topó con que la Diputación concedía las líneas de autobuses a una empresa, con la que los contratos eran prácticamente inmodificables, con lo que los vecinos se preguntaban cómo un problema apremiante que hay que zanjar y muy sencillo de tomar se puede demorar tanto en el tiempo y cómo las instituciones pueden aconsejar una mayor utilización de los servicios públicos basándose en ventajas ecológicas y económicas si hay una clara falta de voluntad de llevar adelante iniciativas como un buen servicio de comunicación.
Después de muchas gestiones y tiras y aflojas, el Ayuntamiento y la Diputación de Gipuzkoa han conseguido convencer a la de Bizkaia de la puesta en marcha de este servicio, que cuenta además con una alta demanda de viajeros.